El número de víctimas mortales del ciclón tropical Freddy ha superado las 300 personas y el recuento podría aumentar, ya que las autoridades de Mozambique están tardando varios días en evaluar la magnitud de los daños y las pérdidas de vidas humanas.
La tormenta arrasó el sur de África el fin de semana por segunda vez tras tocar tierra por primera vez a finales de febrero. Es uno de los ciclones tropicales de mayor duración jamás registrados y uno de los más mortíferos de los últimos años en África.
Al menos 53 personas han muerto en la provincia mozambiqueña de Zambezia, según informaron las autoridades a última hora del miércoles, lo que supone más del doble del recuento anterior. Se espera que el número de víctimas siga aumentando, según UNICEF, la agencia de la ONU para la infancia.
Malaui ha informado de 225 muertos hasta el momento, con cientos más de heridos y algunos todavía desaparecidos. La tormenta mató a unas 27 personas en Madagascar y Mozambique antes de azotar Mozambique por segunda vez.
Las continuas lluvias y los cortes de electricidad han dificultado las labores de búsqueda y rescate esta semana, ya que la tormenta causó graves inundaciones, arrasó rutas y dejó cadáveres y casas enterrados en el barro.